Más que aumentar o levantar, lo que se hace es definir. Así se podría describir el efecto que busca el denominado “lifting” de glúteos, una cirugía disponible en muchos países que termina con el pliegue de la parte baja de ese sector, dándole un aspecto más curvilíneo a las nalgas.
A diferencia de lo que ocurría con la cirugía de aumento, esta técnica desarrollada hace poco más de dos años, busca moldear el trasero.
Se trata de una cirugía mínimamente invasiva que se realiza con anestesia local y que utiliza el efecto de contracción de la piel a través de lipoescultura, provocando el levantamiento de los glúteos en hasta cinco centímetros, lo que prácticamente borra el pliegue subcutáneo. En palabras simples sería, el fin de las nalgas “chatas”.
A diferencia de la liposucción clásica, esta técnica no sólo permite quitar tejido adiposo, sino que considera un tratamiento reafirmante para la piel y la eliminación definitiva de gran parte de la celulitis.
En términos prácticos, lo que permite el lifting de glúteos, además de lucir un trasero más definido, es reducir el tamaño de éste, algo muy buscado por muchas mujeres de todas las edades y que a veces no puede conseguirse solo con infinitas horas de gimnasia. Además, se logra un modelado en los glúteos que permite obtener una diferenciación clara entre la cintura y las nalgas.
Ahora, la pregunta obvia es ¿qué tan molesta es esta operación? Hay que aclarar que la intervención dura aproximadamente 30 minutos y el posoperatorio es similar al de una lipoaspiración. Y como tratamiento post operatorio, en los días posteriores es imprescindible usar una calza elásticada. Pero lo mejor de todo es que no tiene contraindicaciones y puede aplicarse a cualquier edad.
fuente guioteca.com/
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